Escuela Superior de Bellas Artes de Trujillo Macedonio de la Torre en Perú
Trabajo de alumnos avanzados |
Una particularidad del sistema educativo de Perú es que ofrece formación en dos áreas: Artes Plásticas y Educación Artística. Es decir, que forman artistas plásticos y docentes de artes por así decirlo. La primera forma profesionales que se encargan de la especialización en técnicas artísticas para la realización y valoración de obras de arte… permiten la explotación de la creatividad estética para el diseño y la creación de manifestaciones artísticas… fomentan el pensamiento crítico y valoración cultural a partir de las manifestaciones artísticas de diversas épocas y lugares.
A la vez que la carrera de Educación Artística promueve el análisis del contexto cultural reflejado en las imágenes y productos audiovisuales, y desarrolla la capacidad de gestión en proyectos educativos para diferentes espacios laborales, como museos, proyectos de desarrollo local (ONG y sector público), proyectos de arte comunitario y escuelas. Además de fomentar el desarrollo de habilidades artísticas de creación, de análisis de los lenguajes visuales, y de procesos de enseñanza y aprendizaje que permiten un acercamiento integral a los lenguajes artísticos modernos, tradicionales y contemporáneos (visuales y audiovisuales) desde una perspectiva crítica (sitio oficial).
La Escuela Superior de Bellas Artes de Trujillo Macedonio de la Torre debe su nombre al artista peruano de la primera parte del siglo XX. Macedonio de la Torre fue uno de nuestros primeros artistas globalizados, ya que en Alemania, Italia, Francia, Bélgica, etc. pudo alternar con los grandes maestros del Impresionismo y captar las nuevas corrientes que luego traería al Perú (Hojas de Vida, Heduardo). De la Torre fue amigo del escritor Cesar Vallejo.
Al comienzo he copiado la naturaleza, he sido impresionista, pero actualmente brota en mí una voz natural, espontánea. Yo creo que hay que beber de la naturaleza, que es un ejemplo de armonía; en mí brota un contenido interior, como un niño. Antiguamente los pintores hacían su boceto y después lo ampliaban ellos y sus alumnos. No, yo no hago bocetos, todo sale en mí como un torrente. No puedo hacer un boceto del cuadro que voy a pintar porque a veces se amanece en malas condiciones y uno malogra el cuadro que después hay que rectificar, como a mí me ha pasado muchas veces. Yo no demoro mucho haciendo un cuadro, sea grande o pequeño, lo hago en un día. Macedonio de la Torre
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